Por lo general las pequeñas empresas cometen errores que limitan su crecimiento, y eventualmente pueden llevarlas a la quiebra.
“Toda empresa es una idea materializada. Sin embargo, la manera en la que estas ideas se materializan es a menudo un procedimiento algo errático. Cada persona tiene una idea de cómo se supone que se crea una empresa, pero a menudo estas ideas no son muy prácticas, ya que no hay experiencia real para respaldarlas. Tener información y pautas aplicables es muy importante para asegurar que la empresa pueda comenzar su funcionamiento de manera fluida.” Explicó el director de Performia Colombia, Jairo Pinilla.
Organice desde el principio
Cuando una organización tiene dos empleados de planta y una oficina de cinco metros cuadrados, lo normal es que los procedimientos se discutan verbalmente, y todo se maneje de manera más personal y directa. El problema es que cuando el personal aumenta a cinco o diez, manejar todo verbalmente deja de ser viable muy rápidamente, y puede consumir hasta el 70% de todo el tiempo de trabajo por el que paga a su gente.
De manera que es una excelente idea adelantarse a esto, y comenzar a establecer políticas (reglas y procedimientos establecidos) desde el principio. Así evitará tener que pasar malos momentos más tarde, y tendrá soporte escrito para todo su reglamento, lo cual facilitará los procesos en caso de que tenga un problema pertinente a él. En general, agradecerá haberlo hecho.
Base sus contrataciones, ascensos, degradaciones y despidos en estadísticas.
Una microempresa usualmente comienza con una alianza de amigos o familiares, y esto es normal y entendible. El problema es que esta práctica persista cuando la empresa tenga, de nuevo, más de unos cinco empleados. Ayudar está bien, pero su empresa lo primero que necesita es sobrevivir ella misma, y para esto hay que generar ganancias. Y demasiado a menudo los amigos y familiares no son evaluados con base en lo que aportan a la empresa, sino con base en su relación con el dueño.
Y esto debería aplicar a cada miembro del personal. Deje de lado al máximo posible la impresión que tiene de las personas, sus competencias sociales, las palabras bonitas que usen y todo lo que no afecte su trabajo y sus resultados. Sus decisiones deberían basarse en las estadísticas y la producción real de su personal. Y en el complicado mundo empresarial actual, si no hace esto, su empresa no tendrá posibilidades de sobrevivir a largo plazo.
Encuentre que se busca, prodúzcalo, y promociónelo
Finalmente, un consejo más general, es que no se quede en su zona de confort. Seguramente usted comenzó su empresa con un propósito concreto, pero habrá momentos de dificultad en algún punto, a veces incluso al comienzo. Momentos en los que parecerá que nadie quiere lo que usted ofrece. Y si ese llega a ser el caso, su tarea debe ser encontrar qué es lo que las personas sí quieren, que usted pueda ofrecerles. Conocemos muchos casos de empresas destinadas a la quiebra que se reinventaron y volvieron a encontrar el éxito, simplemente porque un gerente ingenioso encontró que aunque la revelación de rollos de fotografías ya no era un negocio, sus máquinas especiales y su personal servían para suplir la gran necesidad de imagen gráfica que había surgido en el mercado.
Ejemplos como este hay muchos. Y si lo necesita, haga encuestas para saber qué es lo que la gente quiere. Y luego prodúzcalo y promociónelo.
El camino no es fácil de cualquier manera… Pero si tiene estas cosas en cuenta, será mucho más fácil de caminar por él. ¡Así que adelante, que el éxito lo espera!
